No esperéis una genialidad. Ni siquiera coherencia.Al fin y al cabo, estas son solo tres páginas de mi diario.Real, de carne y hueso. Con sus virtudes y sus defectos. Sin filtro ni corrección.Es algo así como si vinieras a mi casa y abrieras mi diario...

Ella —Es la hora  Una voz retumbó en la oscuridad que bañaba las cuatro paredes de la celda. Abrí los ojos y, de manera instintiva, cubrí mi cuerpo para protegerme de los golpes; sin embargo, no había nadie allí dentro. Solo yo. Miré hacia la puerta y...

Hay tantas velas como ilusiones, y tantas ilusiones como sueños. Todas ellas caprichosas, sin duda. Algunas se apagan tan pronto como se encienden, como si no hubieran nacido para permanecer encendidas más de unos pocos segundos; También las hay tan frioleras que se extinguen con el...

Las veía por mi ventana. Más hermosas que ninguna, creciendo entre la hierba de los jardines ajenos. Un anhelo anidó en mi pecho: Yo también quería una. Salí a la calle con unas tijeras, dispuesta a hacerme con alguna de aquellas preciosas flores que crecían en...

Creatividad. Estoy segura de que no es la primera vez que oyes esta palabra y, sin embargo, el hechizo de esta vieja conocida ha sido lo que te ha traído hasta aquí.  Tú, que quizá has sido besado por ese don mágico que transforma en historias...

Era un lunes más, como lo habían sido todos los lunes de los últimos diez años. Sentado en el autobús, observo el teléfono que, tras un parpadeo, se sume en un letargo definitivo. Me lo guardo en el bolsillo y miro por la ventana. El...

La primera vez que oí este término fue en el libro El camino del artista, de Julia Cameron. Este libro presenta las páginas matutinas como una herramienta fundamental para la recuperación de la creatividad. Pero, ¿qué son las páginas matutinas? Julia Cameron las describe como «tres páginas manuscritas de...

La librería destacaba entre los negocios lúgubres de la calle, decorada con una guirnalda de pequeñas luces que brillaban en la oscuridad. En el escaparate, una colección de libros navideños, con llamativas portadas en tonos rojos y verdes, descansaba a los pies de un árbol...

Ya había pasado un mes cuando me encontré de nuevo frente a la puerta de aquella librería. El viento del otoño serpenteaba por la calle con la fuerza de un tren, zarandeando los árboles desnudos y despojándolos de sus últimas hojas. Vi a Mario a través...

Era un miércoles cualquiera cuando, volviendo a casa, la tormenta más escandalosa que había presenciado jamás me asaltó en mitad de una calle inhóspita de mi ciudad sin nada con lo que protegerme. Todo a mi alrededor eran locales vacíos con carteles de «se vende»...